Cadetes chaqueños estaban de pasantes en la cárcel de Ezeiza y descubrieron al evadido, que había escapado en el motín del año 2013 desde el Complejo Penitenciario II de Sáenz Peña. El peligroso sujeto estaba preso en la cárcel federal de Ezeiza pero con otra identidad, por el delito de tenencia de arma de guerra. Las imágenes en video recuerdan el violento alzamiento de los reclusos en 2013.

Treinta y tres meses pasaron del motín ocurrido en 2013 en el Complejo Penitenciario II de Sáenz Peña, con personal de esa fuerza y policial heridos, varios destrozos y la fuga de cuatro presos. Hasta la semana pasada faltaba recapturar a uno, que curiosamente fue hallado en la unidad federal de Ezeiza por personal del Chaco que estaba capacitándose para recibirse de oficiales. El peligroso delincuente había sido condenado en esta provincia por un asalto agravado, según publica diario Norte.
El violento motín del 21 de enero de 2013 en el principal establecimiento del Servicio Penitenciario Provincial provocó un antes y después en materia de seguridad perimetral. Por aquel entonces la segunda ciudad del Chaco vivió momentos de tensión y preocupación.
Los que se habían plegado a la revuelta mantuvieron de rehenes a cuatro efectivos y mostraron una violencia inusitada con el personal, hasta a uno se lo vio sobre el cerco, con una escopeta Itaka 12.70, para obligar a las autoridades y negociadores una amplia demanda, mientras un agente era sostenido del cuello y un reo con una faca en la otra mano.

En el hecho, cuatro presos se evadieron del Complejo Penitenciario II, y tiempo después tres fueron recapturados, mientras uno permaneció para la justicia chaqueña prófugo. Sin embargo también está tras las rejas, pero en la unidad federal de Ezeiza y con otra identidad.

La novedad se registró el jueves 8, cuando una comisión del segundo curso de formación para oficiales subayudantes penitenciarios, se hallaba efectuando recorridas y prácticas en la cárcel de Ezeiza.
VARIAS IDENTIDADES
El interno evadido de la cárcel saenzpeñense, se llama Eduardo Rubén Aguirre de 34 años de edad, pero cayó preso con identidad falsa, además de haber usado otros nombres, según surge del entrecruzamiento de datos entre penitenciarios del Chaco y de Ezeiza.

El jueves 8, cuando los pasantes estaban en el Complejo Penitenciario Federal 1 -Unidad residencial 2-, uno de los cadetes y posteriormente corroborada por sus superiores que lo acompañaba, descubrieron a Aguirre entre la numerosa población carcelaria. En medio de algunas dudas, por el tiempo transcurrido, profundizaron algunas pistas y confirmaron que se trataba del evadido el 21 de enero de 2013.

Aguirre está a disposición del juzgado de Ejecución Penal de Castelli, en carácter de condenado por robo agravado con uso de arma de fuego. La pena que debe cumplir es hasta 2018.

De acuerdo a lo que comunicaron las autoridades del Servicio Penitenciario Federal, en esa órbita se halla alojado e identificado como Ramón Leandro López Lagraña o Ariel Orlado, y se lo detuvo por portación de arma de guerra.

El hecho que no deja de ser curioso por la forma en la que fue localizado el peligroso delincuente, durante una pasantía de estudio, ha sido muy bien recibido en el servicio penitenciario local, por entender las autoridades “el alto grado de preparación profesional de los cadetes que pudieron identificar al evadido pese al cambio fisonómico y de identidad”, afirmó Ibarola al confirmar el suceso a diario Norte.

FUENTE Y FOTOS: Norte - Periodismo365